Antecedente inmediato del bebop de la década de los años 40, el swing en nuestros días se niega a existir solo en los libros de historia. Llegó al jazz tras la instalación de los músicos de Nueva Orleans en Chicago, pero también es un ingrediente rítmico del que obtiene el jazz tensión.

Se trata en este caso de un elemento tan importante en la confección del jazz, que a menudo se dice que, si no existe esa irreprimible y sugestiva oscilación de la mente y del cuerpo ante su presencia, no hay jazz. La afirmación, después de la llegada del free en los años 60, es  a estas alturas tan incierta como pensar que el swing solo existe en el jazz.

El swing está en todas partes. Es la orquesta de Count Basie, la de Duke Ellington por supuesto que también. Charlie Christian es swing. Y RoseMary Clooney. Y, asimismo, Louis Prima, y Winnonie Harris, y Bill Wyman y los Reyes del Ritmo, Collin James y los Rockets de Boyd Bennett. El swing es una manera de conducirse en la música y en la vida, que, pese al transcurso inexorable del tiempo, continúa vigente.

Luis Martín

Luís Martín es periodista. Ha escrito para publicaciones como Actual, El Independiente, Vibraciones, Diario 16 o Vivir en Madrid, y ha dirigido programas musicales en Radio 16, Onda Cero, Europa FM y Onda Madrid. Entre los años 2007 y 2009 fue miembro del Consejo de la Música del INAEM y, desde 1993, es crítico de música en el diario ABC. En la actualidad ejerce la dirección artística de JAZZMADRID, el festival de jazz de Madrid; es crítico de jazz de la revista Scherzo, y dirige y presenta en Radio Clásica los espacios Solo Jazz, Los Clásicos del Jazz y del Swing y El Mundo en Radio Clásica. Tiene publicados varios libros, entre los que destacan Bob Dylan y el volumen de relatos Los Olvidados.

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