Disidencias comienza su segunda temporada en el Auditorio de CentroCentro

• Comisariado por Jorge Fernández Guerra, el ciclo tendrá ocho citas hasta diciembre, conciertos híbridos que mezclan música, palabra e ideas

• En el primer concierto, el 16 de marzo, la violista Ana María Alonso interpretará obras de compositores contemporáneos

• La entrada de todos los conciertos del ciclo es gratuita

Madrid, 11 de marzo de 2021

El ciclo Disidencias, comisariado por Jorge Fernández Guerra, que comenzó en la temporada 19-20, regresa al Auditorio de CentroCentro con ocho nuevas citas a lo largo de 2021.

Bajo el subtítulo Laberintos de nuestro tiempo, la nueva temporada seguirá manteniendo su singular propuesta de conciertos híbridos, en los que se mezclan música, texto, ideas, paradojas. A través de un recorrido de temáticas que, pese a su diversidad, hablan esencialmente de la dificultad de la música y, de modo especial, de la complejidad del concierto público, las ocho sesiones propuestas pretenden el desplazamiento de la atención entre la música en directo y la palabra dicha. Ambas percepciones expresivas a veces parecen encontrarse y otras se dan la espalda. Pero ambas indagan en la dificultad contemporánea para hacer suyas tanto la escucha musical como la reflexión sobre temas incómodos; y la alternancia constituye el modo más simple de que la atención descanse.

La primera cita, El derrumbe, será el 16 de marzo, a las 19:30 h. En ella compartirán escenario la violista Ana María Alonso –que interpretará obras de Mario Carro, José Mª Sánchez Verdú, David del Puerto, José Luis Turina, Fabián Panisello y Santiago Lanchares–, y el comisario del ciclo, Jorge Fernández Guerra, quien compartirá textos en torno una figura arquetípica del campo de exterminio de Auschwitz, el muselmann, a través de las voces de Primo Levi, Jean Améry y Giorgio Agamben.

El programa continúa el 13 de abril con la interpretación del monodrama Un tiempo enorme, de Jorge Fernández Guerra, a cargo de la soprano Manon Chovin y la clarinetista Mónica Campillo; el 4 de mayo se podrán escuchar las guitarras del DúoArcadia, Avelina Vidal y Pilar Rius y el 15 de junio a Iberian & Klavier piano dúo, Laura Sierra y Manuel Tévar. Disidencias reanudará los conciertos después del verano; toda la programación está disponible en www.centrocentro.org

Ana María Alonso debutó con quince años como parte del Proyecto Guerrero, bajo la dirección de José Ramón Encinar. Ha estrenado obras de compositores españoles con los que ha trabajado en estrecha colaboración, y ha sido dirigida por maestros como Peter Eötvös, Zsolt Nagy, Cristóbal Halffter, Pedro Halffter, Peter Rundel, Fabián Panisello, Arturo Tamayo, José Ramón Encinar o José Luis Temes, entre otros. Entre sus grabaciones destacan la obra Inmersión para viola sola, que le dedica César Camarero y que se grabó en directo en la Sendesaal de Bremen, así como los monográficos de Fabián Panisello, César Camarero, José Manuel López López y György Ligeti para los sellos Col Legno, Verso o Neos. Colabora con artistas como Rafael Amargo, Antonio Canales, David Peña (Dorantes), Manolo Carrasco y Cómplices y Pierre Boulez. Desde 2005 forma parte de PluralEnsemble.

Se ha formado como solista y músico de cámara con Caridad Zarzo, Dionisio Rodríguez, Thuan Do Minh, Piero Farulli, Antonello Farulli, Gérard Caussé, Enrique Santiago, Daniel Benyamini, Ana Bela Chaves, Tabea Zimmermann y Andreï Gridchuck. Actualmente es profesora de Viola en el Conservatorio Profesional de Música Amaniel y en la Universidad Alfonso X el Sabio de Madrid.

Jorge Fernández Guerra es uno de los compositores españoles más destacados de su generación. Premio Nacional de Música en 2007 también ha sido gestor musical y como ensayista sobre temas musicales. Como compositor, su obra se enmarca en el ámbito de los problemas de cambio de paradigma estético que tomaron forma a partir de la década de los años ochenta. Posteriormente, durante su larga residencia en París, en la década de los noventa, amplió su visión de las transformaciones que la música de creación precisaba acometer en el cambio de siglo, entre ellas la revisión lúcida de la herencia vanguardista y una nueva estrategia de validación social de la composición musical de origen europeo. Durante casi una década fie director del Centro para la Difusión de la Música Contemporánea y del Festival de Música de Alicante, del INAEM (Ministerio de Cultura), y también fue miembro del Consejo de la Música del Ministerio de Cultura.